Monstruos.

Yo tengo un monstruo que siempre me acompaña, siempre está conmigo.
Es malvado y cruel.
Me insulta, me daña. Él es causante de muchas de mis desgracias.
Está en mi mente. Vive ahí y se adueña poco a poco de mí, haciéndome frío e indiferente.

Pero cuando estoy con ella todo es diferente.
Su lado suicida se compenetra con el mío, y disfrutamos ser dos suicidas juntos.

Compartimos tristezas más que alegrías.
nuestros monstruos se entienden bien.
Lo que siento por ella es más de lo que siente un corazón cualquiera al palpitar.
Más que besos fríos de dos enamorados torpes.
Dos suicidas juntos que se aman más de lo que se odian así mismos.

Tal ves algún día acabemos con nosotros.
Pero por ahora ella es la única que separa el dolor que causa mi monstruo, de mí.

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